Barcelona Beer Company crea TapRoom para disfrutar de su cerveza artesana

La Beer está de moda o eso parece. Pero curiosamente aunque parece que la cerveza artesana es algo novedoso, no es así. No hemos descubierto ninguna panacea. De hecho el consumo en este país es, con diferencia, mucho menor que en otros. En EEUU el consumo llega al 10% del total y en Canadá hace más de 150 años que se produce este tipo de cerveza. La versatilidad de esta bebida, la cantidad de matices que encontramos y un público receptivo ha hecho que los cerveceros artesanos hayan logrado posicionarse en el mercado nacional e internacional como líderes. De hecho la gran mayoría de la producción se destina a la exportación.

Aquí este “boom” ha arraigado bien. La mayoría de elaboradores empezaron poco a poco y han ido ganando terreno en el mercado con cada vez más puntos de distribución. No hay más que ver la proliferación de locales especializados donde degustar las cervezas.

Un mundo donde Oriol Renart, Director y Co-Fundador de Barcelona Beer Company, parece sentirse como pez en el agua. Su tesón le llevó a Nueva York y presentarse delante de Alex Trochut con una caja de cervezas a pedirle el diseño para una de ellas: Barcelona. Así, sin más, después de que el diseñador le contestara que si quería verle, la única opción era que viajara a EEUU…Obviamente, consiguió el compromiso y la admiración de Alex.

Posiblemente esa firmeza es la que ha hecho que hoy todos conozcáis Barcelona Beer Company, sobre todo, si sois aficionados a la cerveza artesana. Sus elaboraciones más conocidas son: Barcelona Beer (American Pale), Cerdos Voladores (Indian Pale Ale), la Bella Lola (Mediterranean Blonde Ale), Piquenbauer (Ginger Wheat Beer) o Miss Hops (High IPA). Esta última premiada el Campeonato Nacional de Cerveza, con la medalla de bronce en al categoría de IPA.

Oriol, sigue nadando a sus anchas y acaba de abrir Beer Company TapRoom. Allí podrán degustarse sus cervezas y otras “invitadas” que irán rotando y que serán servidas a través de sus 16 tiradores. Diez de ellos serán destinados a sus propias cervezas: las cinco ya nombradas más Big Bear, Sr. Lobo, Pili The Pils, La Niña Barbuda y Nicotto.

El local es cómodo y funcional, al principio de la calle Muntaner, prácticamente esquina Sepúlveda, y una curiosa e interesante fórmula permite probar 4 de sus cervezas en un tamaño tipo caña y contrastar sabores y matices.

Pero se trata de una opción, si tienes claro qué pedir, encontrarás tu botella sin problemas.

Para acompañar la bebida no faltan tapas clásicas como patatas bravas, un buen jamón o unas croquetas; bocadillos algo más atrevidos, como el de calamares con mayonesa de wasabi (que me llama a gritos…), albóndigas o pato pekín y ensaladas bien completas. Una carta que te permite desde tomar un aperitivo hasta una comida bien completa.

Un nuevo templo de la cerveza artesana en Barcelona que si sois cerveceros no podéis dejar de visitar. Y si no lo sois, es el lugar perfecto para iniciarse.