Cent-onze
Por su aspecto exterior llama la atención aunque el bullicio de la Rambla de Barcelona le rodea, parece que dentro puedes conservar cierta discreción. Cent-onze es el restaurante del Hotel Le Meridien HUB, y como hace unos años los hoteles han abierto las puertas de sus restaurantes como algo independiente al hotel, allí que nos fuimos.
Pensamos que es una opción fantástica, pues generalmente son cocinas elaboradas y el buen servicio que suele darse en los hoteles de cierta categoría se hace extensivo al restaurante. En más de una ocasión nos hemos topado con gratas sorpresas y grandes cocinas visitando estos restaurantes.
Existe la convicción general de que los restaurantes que están en pleno meollo no son buenos y que se aprovechan del turista que en muchos casos, se come una paella sin más referencia y “cuela” cualquier cosa. Y los habrá, de hecho los peores catalogados de Barcelona están en la Rambla, pero tampoco es justo descartar todos ellos por esa cuestión, los hay muy buenos, buenos, aconsejables y correctos.
Cent-onze está en la misma Rambla 111, esquina con Pintor Fortuny. El espacio destinado al restaurante es amplio y tiene unos ventanales estupendos a la Rambla. Si tenéis la suerte de que os den una mesa que tenga vistas, tenéis el entretenimiento asegurado. Nosotros la tuvimos!
Restaurant Cent Onze
Un buen Jazz de música ambiental, unos tonos más bien oscuros, grandes cortinajes y techos altos con una gran lámpara es lo más destacable de la decoración. Nos recibe el Sumiller del restaurante, Francisco, que nos acompaña a la mesa y nos acomoda, nos da la carta y se retira para que hagamos nuestra elección. Se puede optar por Menú laborable o de fin de semana, Menú degustación y carta , además de algún paquete en fechas especiales combinado con estancia en el hotel.
Tienen una carta de vinos extensa, bien equipada aunque los precios son un poco altos: Perro verde, Martín Codax… pero nos decantamos por un Priorat (parece que últimamente tira esta zona!) para acompañar dos ensaladas de primero, un pescado y el plato sugerido por ser el mejor valorado por los clientes.
Croquetas de Risotto
Unas Croquetas de Risotto alegran la mesa mientras que traen la comida, ese bocado que abre el apetito, si es que no está lo suficientemente despierto. En concreto estas croquetas eran curiosas por su aspecto, parecían unos panellets, pero no por el sabor, no eran nada dulces 😉 y ya precediendo a la comida, para acompañar el pan normal, de aceitunas o semillas que nos dieron a elegir, nos traen una bonita mantequera y un pequeño bol con aceite y olivada.
Mantequilla y aceite con olivada
Mientras que nos traen las ensaladas, Francisco repasa que todo esté correcto y nos explica que tiene entre manos un proyecto con los vinos: maridajes y catas. Le comentamos lo que nos había parecido la carta de vinos del restaurante, pero al parecer quieren modificarla, hacerla más reducida, más selecta y más flexible, cambiándola más a menudo. Mientras que estamos charlando, llegan las ensaladas, sin ninguna tardanza más que la necesaria para hacerlas. Primero, la Ensalada de Lechugas de la Boquería.
Ensalada de Lechugas de la Boquería
Completísima con tomate, huevo, pimiento, pepino, zanahoria, unas hojas frescas y crujientes y una buena ración de atún. Bien aliñada. Puede servir de plato único un día sin demasiado apetito. Algo más que una ensalada verde que, aunque de todo admite, muchas veces se queda en cuatro hojas y un par de trozos de tomate. No fue el caso.
La segunda ensalada era Ensalada de Jamón de Pato
Ensalada de Jamón de Pato
También generosa, y no solo de canónigos: jamón de pato, manzana verde, virutas (visibles y sabrosas) de foie y reducción de módena. Era una ensalada, sí, pero en este caso más sofisticada que la anterior. Sabrosísima. Muy aconsejable, si tenéis que elegir una de las dos, optar por esta. No porque la otra sea mala, sino porque es más cotidiana y no sorprende.
Suprema de merluza al vapor, el pescado elegido.
Suprema de merluza al vapor
Así, sin más, puede parecer algo muy simplón, pero esta estaba servida con puré de coliflor y vainilla y arena de olivas negras. Un puré que transformaba completamente el plato y lo hacía de una elegancia extrema. Finísimo de sabor, el pescado en su punto, el puré suavísimo. Excelente, nos sorprendió mucho este plato por ser muy equilibrado. Eso sí, debo decir que la ración nos pareció justa: era un trozo de merluza que no destacaba por su tamaño.
Según indicaba en la carta la Espaldita de Cordero era el plato mejor valorado por los clientes. Había que probarlo.
Espaldita de Cordero
Así como la ración de merluza fue tirando a escasa, en el caso del cordero fue todo lo contrario. Es cierto que el precio de los platos, que podéis ver en su carta, no es el mismo, pero no es indicador de la ración. Definido como horneado a baja temperatura y acompañada de un trinxat increíblemente bueno, la espalda de cordero no estaba a la altura de lo esperado. Ojo, no quedó nada en el plato, es muy pero que muy comestible, pero nos sorprendió que fuera el mejor catalogado. Era un cordero bien asado, sabroso, bien horneado, pero estaba un punto duro. Si es una cocción a baja temperatura la carne suele quedar bastante más tierna. Eso nos dio que pensar: o se cocinó a más temperatura de lo anunciado o le faltaba tiempo.
Dos postres que no eran ni Tiramisú ni Tatín (por fin ¿no?) : Bizcocho de chocolate fondant con peras confitadas, speculoos de café y helado de bailey´s.
Bizcocho de chocolate fondant con peras confitadas, speculoos de café y helado de bailey´s
Ahí es nada!. Mirad su aspecto… tentador verdad?. Pues, para nosotros, mejor de aspecto que de sabor. Lo esperábamos más dulce, más sabor a chocolate o más cremosidad. Pero como siempre, es una cuestión de gustos y expectativas. Del postre, nada negativo que comentar. Estaba bien hecho y muy bien presentado. Un postre más al bolsillo!
Un nombre largo y una gran cantidad de sabores y texturas para el segundo postre.
Biscuit glacé de coco caramelizado con fruta de la pasión, mousse de chocolate blanco, rocas de yogurt y sorbete de litchies.
Poco habitual, de esos postres que solo tomas en restaurantes y que (nosotros) no te harás nunca en casa porque son 5 juntos: El biscuit, la fruta, el yogur, la mousse, el sorbete…pero muy bueno!. Puede parecer demasiado cargado, demasiados sabores pero todos eran con un toque tropical que encajaba y ninguno era excesivamente fuerte. Además, las diferentes texturas te permitían que cada bocado fuera diferente. Totalmente recomendable!.
En general y resumiendo, la comida estuvo correcta, pero alguno de los platos se podrían mejorar bajo nuestro punto de vista. A destacar, por un lado, el servicio correctísimo, cualquiera de los camareros, así como Francisco, tuvieron con nosotros un trato estupendo. Por otro, nos llamó la atención la diferencia de ración de la merluza y la del cordero, muy desproporcionada. La carta de vinos era extensa, pero el precio estaba excesivamente cargado.
Eso sí, nos gustaría destacar que en ningún momento percibimos ningún trato diferencial al ir con el Pasaporte Gourmet. Sabemos que hay establecimientos donde las promociones influyen negativamente, pero la verdad, en todos los casos que hemos usado el pasaporte (Semproniana, El Túnel d’en Marc Palou, Àpat) no se ha notado en nada más que en la cuenta: la comida para las dos personas (con el 50% de descuento) 74 Euros, pero es que 30 fueron del vino escogido, un Igneus del que os hablaremos el viernes.
Igneus
Un lugar que teniendo en cuenta algunos establecimientos que le rodean, es una buena opción si estás por la zona. Debemos de ser conscientes del lugar dónde está Por favor, tomad esto como una opinión, nada más. No pretendemos ni mucho menos ser negativos pero por la oferta gastronómica que hay ahora en Barcelona, para el cliente de aquí que conoce más la ciudad y no está de paso quizá hay mejores alternativas.
Jordi Castaño (La cuina de Mindundi)
Per les fotografies, fa bona fila tot el que vareu demanar i el lloc sembla força maco. El preu, realment competitiu amb aquesta oferta, però sense, crec que seria una mica car, no? Aleshores, està bé això del Pasaporte Gourmet? Ho recomanes? Vaig veure que ho feien, però no em va cridar l'atenció cap dels restaurants que figuraven al llistat de la guia. Salutacions!
Baco y Boca
Si, el lloc està bé, però tampoc espectacular. Una opción més I el que comentes el preu amb el passaport perfecte. Sense ell, es dispara, seria força car. A nosaltres això del passaport ens va bé, per descobrir alguns restaurants o aquells que teníem pendents i aprofitem el descompte. La beguda no entra i el menú tampoc, pero la carta sí. Clar si els llocs no et criden l'atenció d'entrada, no li veuràs el què. Però als que nosaltres hem anat, de conya: aquest, Semproniana, Àpat, El Túnel d'en Marc Palou..
Ricard Sampere (@ricardsampere)
És curiós que ens costi (al menys a mi), el fet d'anar a restaurants d'hotel. Sembla com si el restaurant fos el negoci secondari oi?. En tot cas, és un perjudici que cal superar... En aquest comparteixo el que dieu en els comentaris. Que amb aquest preu bé, però sense descompte, no estaria a l'alçada RQP.
Baco y Boca
Si, costa veure-ho com un negoci independent. No ho fem sovint, però de tant en tant ho recordem i ho fem. Uns dels primers que vam anar i potser d'aquí va sorgir contemplar aquesta opció més sovint va ser el H1898. Aquest sí que és recomenable, també a la Rambla i fa menús de temporada. Vam pendre un bacallà amb taronja i xocolata blanca impressionant.
calidadgourmet
Complicado decidirse por alguno de los platos pero creo que las croquetas de risotto es uno de nuestros favoritos.
Baco y Boca
Si muy curiosas. Pero estas no están en la carta!!
Vuelta al Centonze: tapas y platillos | Baco y Boca
[…] Cent-onze […]
Vuelta al centonze Le meridien: tapas y platillos – MEW Magazine
[…] hace un tiempo en el Restaurante Centonze, del Hotel Le Meridien de Barcelona. Aunque está en plena Rambla y eso puede ser algo que de […]
Leticia Rey Master Barista en Le Meridien Barcelona | Baco y Boca
[…] Cent-onze […]
Navidad en Le Meridien Barcelona | Baco y Boca
[…] las fiestas de Navidad. Nochebuena, Navidad, Sant Esteve y fin de año podrán celebrarse en el restaurante centonze. Ninguno de los platos típicos de estas fiestas queda en el olvido. No faltará la escudella, ni […]