“Luisa Ramos, fundadora de Baco y Boca.”
En el 2013 Luisa Ramos (1968-2020) se atrevió a cambiar su profesión por su vocación. Dio un giro radical a su vida y decidió que quería dedicarse a lo que amaba de verdad, la gastronomía, los vinos y los descubrimientos de lugares que le acercasen a ambos.
Lo hizo desde la humidad y la honestidad absolutos, aprendiendo a diario y enseñando a sus seguidores de redes sociales y blog en la misma medida.
Estas fueron sus palabras al alumbrar su proyecto: “Baco y Boca, vinos y manjares para humildes sibaritas, es mi declaración de principios”.
Se confesaba humilde por su “su inmenso respeto hacia los profesionales que nos entregan sus creaciones, hechas de esfuerzo y ánimo de seducción”. Y sibarita porque pretendía “distinguir lo exquisito de lo mediocre y percibir aquello que separa lo que está hecho para cumplir de lo que se hace para seducir”.
Su listón siempre fue alto: “Busco dar a conocer al mayor número posible de amigos cuáles han sido mis descubrimientos y dónde se encuentran los tesoros. Ya no hay mapas ni códigos secretos, ahora son las redes sociales nuestras palomas mensajeras, las que nos permiten divulgar y compartir”.
Luisa se fue demasiado pronto, pero nos dejó un Baco y Boca vigoroso, con hambre de artículos y seguidores, con cuerpo como los grandes vinos que tanto le gustaba descubrir y contar. Con mucho todavía por explicar, como ella habría querido.