Bloody Mary Cocktail Lounge, versionando el clásico
Bloody Mary Cocktail Lounge, la cercanía de un bar y la sofisticación de una coctelería.
Bloody Mary Cocktail Lounge. Con el nombre casi lo dice todo ¿verdad?. No hay duda de que vamos a hablar de un sitio donde el combinado es el protagonista: El Bloody Mary, ese cóctel que se toma para la resaca, o por lo menos en mi caso, es con lo que lo relaciono. Con la resaca y con los años más glamourosos de ese Hollywood de los años 40.
Nos vamos al barrio de Gracia de Barcelona a visitar este pequeño y acogedor local algo escondido. Un local que coge el nombre de este clásico que casi todo el mundo reconoce y le dedica el salón, el Lounge del Bloody Mary.
Del Bloody Mary dicen que es originario de París, de los años 20 del siglo pasado y fue elaborado por primera vez por Fernand Petiot. También dicen que su nombre se debe a la reina María I apodada la sanguinaria.
Qué habrá de verdad y qué de leyenda es una conversación que tenemos con Alessandro el bartender de Bloody Mary Cocktail Lounge. Una conversación distendida, cómoda, que cualquiera podría haber tenido, ya que Alessandro apuesta por la relación directa con el cliente, por la cercanía, porque su local sea un sitio de reunión donde tomar unas copas y pasar buenos ratos de ocio, de charla y de risas… Es más, estoy convencida de que en alguna ocasión, hasta de llanto.
Alessandro, como él mismo dice, es un poco el psicólogo del barrio. Y es algo a lo que no quiso renunciar cuando se planteó montar un negocio con el que ganarse la vida. Dudaba entre la restauración o la coctelería, ya que tanto él como Verónica, su compañera, son amantes de estos dos mundos, por otro lado bastante relacionados. Alessandro desde bien joven destacaba por hacer extraños combinados (creo que es lícito no llamarlos aún cócteles) cuando las noches de fiesta propias de la juventud le llevaban a, de una forma casi cómica, ser en el barman de su cuadrilla. Por entonces, las mezclas sin ningún criterio de medida eran válidas siempre y cuando las sirviera en una piña, acompañadas de una guinda, una bengala o una sombrilla de papel. No sé si en algún momento pensó que acabaría siendo un profesional del tema, pero poco a poco la diversión pasó a ser algo más serio.
El caso es que al final descubrir sus aptitudes en este campo le llevó a formarse y a perfeccionar su técnica para dedicarse profesionalmente. Para ello ha pasado por varios hoteles de cuatro y cinco estrellas que le han dado el aplomo necesario para sentirse detrás de una barra tan cómodo como en su casa.
Los años pasados en estos establecimientos le han permitido aprender el oficio y sobre todo, saber qué le gusta y de qué quiere prescindir. Y se queda con un trato al cliente lo más exquisito posible, descartando la distancia.
Pero Bloody Mary Cocktail Lounge, es además del proyecto de Alessandro y Veronica una coctelería en la que encontramos, de entrada, 10 versiones del cóctel Bloody Mary. Y a cual más sorprendente. Teniendo en cuenta que esta bebida, es más típica de un aperitivo por su contundencia (no olvidemos el zumo de tomate), en ella introducen ingredientes gastronómicos, mezclando sabores más típicos de una comida que de una bebida. El Bloody Kentucky (tomate, bourbon y salsa barbacoa), su Orient Express (con sake, salsa de soja y wasabi) o su Bloody César (con jugo de almejas) son claros ejemplos de como buscar nuevas expresiones de algo tradicional sin que se olvide su esencia.
Además de estas diez versiones que hoy podemos encontrar en su carta, no faltan cócteles de autor en los que también buscan la originalidad y la combinación equilibrada de sabores en los que intervienen diferentes destilados, en algunos casos infusionados por ellos mismos para sean únicos. Tía Teresita donde se mezcla el ácido y el dulce, Bourbon Street donde se percibe un gusto a cacao o Yokohama Martini uniendo oriente y occidente.
Viendo su carta, es posible que sufras de indecisión. En Bloody Mary Cocktail Lounge no es un problema, sino más bien un reto porque allí estarán siempre dispuestos a escuchar cuáles son tus preferencias y, si estás de acuerdo, a aconsejarte o incluso a dejar en sus manos tu elección, llevándote quizá a degustar un cocktail único y exclusivo para ti.
La coctelería está resurgiendo, y lo estamos viendo en las nuevas aperturas de locales grandes que pasada la hora de la cena se transforman ofreciendo copas algo más sofisticadas que el Gin Tonic. Y eso que este último da juego. Es más, los hay hasta que se atreven a sugerirte una comida maridada con cócteles.
No son más que indicios de que la mixología está más viva que nunca. En este caso, aunque en Bloody Mary Cocktail Lounge pueden ofrecer algo sencillo para comer como acompañamiento, el protagonismo es para la copa. Para la clásica o la innovadora, para la mezclada o la pura, para los tradicionales o los actuales, pero siempre la copa.
¿Quieres tomar más copas?